La curación de contenidos implica la selección, organización y presentación de la información relevante sobre un tema específico para un público determinado. A diferencia de la creación de contenido original, la curación se centra en filtrar y compartir información existente de forma que añada valor y contexto, facilitando la comprensión y el acceso a contenido de calidad.
¿Por qué es importante?
Saturación de información
En la era digital, estamos inundado de información. La curación de contenidos ayuda a filtrar el ruido y presentar sólo lo más destacado y valioso, ahorrando tiempo a los consumidores de contenido.
Calidad sobre cantidad
Al enfocarse en contenido de alta calidad, los curadores (o las empresas que contraten sus servicios) pueden posicionarse como fuentes fiables de información, ganando visibilidad y, lo más importante, la confianza de su audiencia.
Posicionamiento como experto
Curar contenido demuestra conocimiento y comprensión profundos de un tema específico, ayudando a posicionar al curador como un experto en su campo.
Mejora de la experiencia del usuario
Al proporcionar contenido relevante y bien organizado, los curadores mejoran la experiencia del usuario, haciéndola más agradable y eficiente.
¿En qué consiste?
Charlamos con Roser Monté, historiadora, documentalista y social media, experta en curación de contenidos y creación de newsletters, para que nos cuente en que se basa el trabajo de este perfil. Cómo se lleva a cabo el proceso, qué herramientas se necesitan y qué proyectos o empresas demandan hoy día los servicios de curación.
Háblanos de ti
¿Qué estudiaste?
Estudié Historia, especializándome en contemporánea. Después hice un segundo Grado de Biblioteconomía y Documentación y un Postgrado de Social Media.
¿Por qué decidiste especializarte en esta área?
Mi primera idea era trabajar en algún archivo, buscando documentación que explicara el presente basándose en su factor histórico. Con este mismo enfoque buscaba en internet información para poner en contexto las noticias que encontraba o cualquier cosa de no ficción que leía. Creo que esto fue la semilla que me hizo ir profundizando en la búsqueda de contenidos y descubrir al final que había una especialización dentro de la biblioteconomía, aunque en ese momento era a base autoaprendizaje, ya que no había estudios como tal.
¿Ha sido difícil abrirse camino en este campo?
Un poco. Es una especialidad poco conocida. Muy usada, pero poco conocida. Me refiero a que muchos creadores de contenidos, por ejemplo, hacen curación de contenidos. Buscan, o encuentran, artículos que les interesa y lo recomiendan haciendo un resumen o una cita, pero no lo ven como un perfil propio. Así que cuando lo das a conocer, no siempre se ve su utilidad.
También se puede dar a conocer a través de la documentación o la biblioteconomía, explicando sus diferencias. Pero, como debes saber (y saben otros documentalistas), no siempre se valora este perfil fuera de las bibliotecas o del ámbito de los archivos.
Cuéntanos un poco cual ha sido tu trayectoria profesional
¿Cuánto tiempo llevas dedicándote a la curación de contenidos?
Llevo 15 años. Empecé a hacer curación de contenidos para mí y lo que aprendía lo aplicaba a comunicación online de una empresa donde trabajaba hasta que decidí ponerme por mi cuenta. Mezclo la curación con la creación de contenidos y la comunicación digital.
¿Cómo fueron tus comienzos?
Trabajaba en una empresa del sector de la salud, como community manager. Me dediqué a aplicar lo que estaba aprendiendo por libre sobre curación de contenidos para aplicarlo en la comunicación de la empresa. Era una forma de darle una vuelta a la comunicación, daba a conocer algunos de nuestros servicios y los ponía en contexto con estudios, con casos de uso que se llevaban a cabo en otros países…
¿Cuáles son los proyectos más relevantes o, especiales para ti, en los que has trabajado?
Los más especiales han sido aquellos en los que me han dejado ser más creativa. He escrito newsletters de noticias sobre un sector, no haciendo solo el resumen de la noticia, también ampliando información con noticias relacionadas, imágenes o música. También he hecho resúmenes de jornadas empresarias, no solo con las publicaciones que se hacían durante la jornada, sino ampliando información y poniendo en contexto palabras de los ponentes (si hablaban de un estudio, yo añadía el estudio en el resumen…)
Adentrémonos en la curación de contenidos
Para quienes no están familiarizados con este término, ¿Qué es exactamente esto de “curar contenidos”? ¿Qué hace un curador de contenidos?
Curar contenido es todo el proceso de buscar, leer y seleccionar un contenido escrito, audiovisual…, con el objetivo de filtrar todo el contenido existente y compartir el contenido que sea relevante y de calidad sobre una temática específica en el mismo momento que se pone en contexto.
El curador es la persona encargada de hacer esta tarea, en la que implica la búsqueda y selección de contenidos variados, organizarlos para que tengan coherencia cuando se dan a conocer. Además de seleccionar los contenidos, el curador proporciona un contexto adicional, como análisis, comentarios, o resúmenes, para ayudar a la audiencia a comprender mejor la información. Y finalmente se comparte vía blogs, newsletters o redes sociales.
El curador, para poder hacer este trabajo, necesita conocer bien su audiencia y a quien van dirigidos los contenidos que cura, así como el sector en el que trabaja y cuáles son las fuentes de información fiables que puede usar en su curación.
¿Cuál es el proceso que llevas a cabo a la hora de curar un contenido?
Primero me informo del sector o del cliente con el que trabajaré. Sabiendo cuáles son sus intereses, busco referentes y fuentes de información fiables y me preparo alertas o sistemas de recogida de la información que vayan publicando. Este es el primer paso.
En el día a día, el trabajo es diferente. Leo lo que se ha publicado del sector en el que trabajo y guardo las noticias que me parecen más relevantes. Si hay una cita que encuentro interesante ya la marco para tener presente. En algunos casos busco información extra para contextualizar esta información que estoy leyendo.
Una vez tengo suficiente información (nunca es suficiente, me marco un límite dependiendo si es para una newsletter o para redes sociales), la vuelvo a leer para hacer un resumen o extraer alguna cita y la edito para publicar en su red social o plataforma.
En todo el proceso tengo en mente asegurarme que se cita la fuente original y que esta es fiable (si no puedo asegurarlo busco noticias relacionadas publicadas por otros medios o referentes).
¿Qué herramientas utilizas?
Hay muchas herramientas para recopilar información, pero yo, después de diferentes pruebas y años, me quedo con Feedly para recoger la información, así como la subscripción a newsletters. Para organizarla y contextualizarla con Notion puedo trabajar mucho, ya que me permite clasificar, resumir, poner links o documentos.
A la hora de compartir, uso herramientas de diseño como Canva y las mismas plataformas de redes sociales, así como herramientas de programación (Later, Facebook Creator…)
Veamos qué escenario se plantea para estos profesionales
Quiénes suelen demandar tus servicios ¿empresas, particulares…?
Mis servicios van dirigidos a empresas o marcas personales. Son marcas que quieren posicionarse como referentes o informarse sobre nuevas tendencias. Algunos lo usan como información privada para ellos, otros lo comparten para dar a conocer los cambios en su sector.
¿Cómo ves el futuro de la profesión?
Si lo comparo con otros países, como en Estados Unidos, veo que ellos están muy avanzados en el tema de curación de contenidos, entendiendo que son perfiles diferentes en el mundo de la comunicación y hay muchas marcas que usan la curación para comunicar. Vamos más lentos, pero podemos llegar a ese punto.
Lo que veo complicado es que se vea como un perfil separado de la comunicación. Se mezcla con las tareas del creador de contenidos o del community manager. Y esto hace que explicar el perfil y sus beneficios a las empresas pueda ser más costoso.
Pero las empresas necesitan información, y ahora se genera mucha. Se necesita alguien que les filtre todo lo que se publica y les ofrezca lo que realmente les puede ser útil. Así que soy positiva con el futuro.
¿Crees que se reconoce como debería?
Creo que te he contestado en la pregunta anterior. No se reconoce lo suficiente. Nos podemos quejar de las ofertas de trabajo que meten todas las tareas de la comunicación dentro de un mismo perfil. Esto no pasa solo con los perfiles de comunicación. Seguro que en todos los oficios hay ejemplos parecidos. Y esto es por desconocimiento muchas veces.
Lo que me sabe mal es que este desconocimiento venga por parte de otros comunicadores. De creadores de contenidos. Profesionales que reconocen la importancia de este trabajo, pero que no le ponen nombre. Según ellos entra dentro del perfil del creador, buscar, seleccionar y poner en contexto la información.
Si no somos nosotros mismos quien damos valor a los diferentes perfiles, no conseguiremos que desde fuera el sector se reconozca.
Después de la conversación con Roser, nos quedamos con su optimismo respecto al futuro de su profesión. Desde aquí, queremos destacar la importancia de un perfil frecuentemente ignorado fuera de su campo.
La curación de contenidos es una herramienta poderosa y versátil para cualquier profesional, empresa o institución, sin importar su sector. Confiamos en que la figura del content curator se vuelva cada vez más reconocida y valorada por el público en general.