Berta Cuadrado Mayoral nos cuenta…
Desde el año 2017 trabajo como responsable de una biblioteca con vocación artística pues presta sus servicios a la Escuela Superior de Arte Dramático de Castilla y León (ESADCYL) y a la Escuela Profesional de Danza de Castilla y León (EPDCYL), gestionadas ambas por la Fundación Universidades y Enseñanzas Superiores de Castilla y León (FUESCYL), perteneciente a la Junta de Castilla y León. Casi en las afueras de Valladolid, en un edificio diseñado por Ricardo Bofill muy conocido por ser sede del Centro Cultural Miguel Delibes, estas dos escuelas modelan talentos y enseñan la técnica a alumnos que más adelante nos conmoverán desde los escenarios.
El fondo se divide principalmente en dos disciplinas: Arte dramático y Danza. Desde el año 2006 esta pequeña biblioteca-reino viene creciendo y adaptándose a las necesidades docentes y de investigación de la comunidad académica a la que sirve. En el aciago 2020 se calzó las botas de siete leguas y dio el salto de Abies a Sophia, un sistema de gestión bibliotecaria más adecuado a la madurez de las escuelas, especialmente teniendo en cuenta que en 2019 se puso en marcha, redondeando los estudios de Grado, el Máster oficial en enseñanzas artísticas: pensamiento y creación escénica contemporánea de la ESADCYL que ya va por la quinta edición. Aquí se puede obtener información concreta sobre la biblioteca y acceder al catálogo.
¿Servicios?
Préstamo, renovación, reservas, lectura en sala, información y referencia, ordenadores de consulta, desideratas… y tal vez los más laboriosos: la Difusión Selectiva de Información (DSI) y la formación de usuarios. El primero se concreta en dos publicaciones mensuales: el boletín de novedades y el de recursos, que da cuenta de concursos, festivales, residencias artísticas, formación, ofertas de empleo, convocatorias, etc. Y la formación de usuarios se centra en dos talleres anuales: uno sobre el manejo del catálogo de la biblioteca (especialmente orientado al alumnado de primer curso) y otro taller sobre elaboración de referencias y citas bibliográficas (para alumnos de cuarto curso).
También desde la biblioteca se elaboran otros documentos que pensamos pueden tener utilidad: la propia guía de uso de la biblioteca, una selección de las bibliotecas de la ciudad de Valladolid, una relación de fuentes de investigación en acceso abierto, un listado de librerías de segunda mano de la ciudad, etc.
Con motivo de efemérides, premios relevantes de las Artes escénicas, charlas, talleres, cursos y visitas de maestros y creadores a las escuelas se elaboran centros de interés con exposición de libros, bibliografías y biografías. La falta de espacio, entre otros motivos, obliga al expurgo y da como resultado el Book Thursday, en la víspera del Black Friday, como posicionamiento frente al consumismo. En esa jornada se regalan a la comunidad libros, posters, audiovisuales… que ya no tienen cabida en la biblioteca.
Buscando la visibilidad y añorando colaborar, tratamos de mantener contacto con instituciones y darnos a conocer a través de la web, de distintas redes sociales (incluido mi perfil de Twitter @JimenaAlmenara) y directorios de organismos como la Biblioteca Nacional, el Ministerio de Cultura y Deporte, el Consejo de Cooperación Bibliotecaria (CCB), etc.
Bien visible fue la biblioteca, algo a agradecer a la Dirección de la ESADCYL, pues el Día Mundial del Teatro se organizó un encuentro con egresados y el manifiesto anual se grabó en este espacio. Y así, entre colegas, debo decir que trato con usuarios peculiares; llevan insertado un germen de rebeldía por edad y vocación, así que es mucho mejor ganártelos y razonar las normas que poner carteles con “Se ruega silencio” o “Prohibido introducir comida”. Acaban siendo disciplinados cuando comprenden el motivo.
Elementos para la esperanza: estamos hablando de una biblioteca especializada y además dependiente de dos centros de enseñanza, uno de ellos de enseñanza superior, dotada de presupuesto anual para adquisiciones, para el mantenimiento del sistema de gestión y para la contratación de esta humilde profesional que os escribe, a la que además alientan, apoyan y facilitan formación y desarrollo profesional. Entre otras cosas he disfrutado de una beca Erasmus+ para conocer el sistema bibliotecario de la Università degli Studi Roma Tre.
En lo personal sólo puedo decir que he encontrado mi sitio. El Arte, en cualquier expresión, nos salva, nos completa, nos hace crecer. Colaborar con las Artes escénicas desde este rinconcito, ser cauce de información, apoyar a la docencia, al estudio, a la investigación es un honor, un orgullo, una misión y una felicidad diaria. Y, creedme, el anecdotario laboral engrosa día a día.
Firma invitada por Inma Herrero