Que en la biblioteca ocurren cosas inexplicables es algo que todos sabemos: libros que cambian de sitio, objetos que aparecen y desaparecen, extraños sonidos que no se sabe de dónde vienen… Y es que en toda biblioteca hay magia, mucha magia. Por el simple hecho de estar habitada por libros y por personas que los leen, por palabras y por imágenes, por música y por cine… Pero también es cierto que los bibliotecarios podemos hacer mucho por potenciar esa magia, por hacerla visible y apetecible. Desde diseñar actividades para grupos escolares centradas en este tema, hasta programar la visita de magos especializados en espectáculos con libros, o talleres en los que se enseña a los pequeños lectores a realizar trucos e ilusiones, pasando, por supuesto, por crear centros de interés con los fondos relacionados con ella.
Una actividad que funciona muy bien es ¡Magia potagia!, que los bibliotecarios infantiles de la BPE de Zamora realizan con grupos escolares de 3º y 4º de Educación Primaria. Con ella pretenden dar a conocer no sólo los libros que enseñan a hacer magia, sino también algunos de los numerosos títulos para niños de 8 y 9 años que tratan el tema de la magia o que la utilizan como recurso narrativo. La actividad se divide en dos partes. En la primera, centrada en los trucos que podemos aprender en los libros, los bibliotecarios-magos cortan a la gente por la mitad con dos cuerdas, adivinan el pensamiento, entrelazan dos clips sin tocarlos o hacen desaparecer monedas debajo de un vaso. Y en la segunda, se presentan títulos de narrativa mediante un original sistema: los alumnos van saliendo de uno en uno y eligen un libro para defenderlo ante sus compañeros, leyendo la sinopsis o las primeras líneas del texto, con la finalidad de evitar que éstos lo envíen a la hoguera (como en tiempos pasados, en que se quemaban libros por considerarlos dañinos o cosas de brujos). Si la defensa es buena, el grupo gritará: «¡Que se salve!»; pero si es mala: «¡A la hoguera!». La buena noticia es que los libros enviados a la hoguera (hecha con papel celofán rojo y amarillo) es también mágica y los libros que han caído en ella aún tienen la oportunidad de salvarse si todo el grupo consigue crear un libro de hechizos que sean lo suficientemente potentes como para evitar que el papel se queme. En las páginas 37 a 42 de la Memoria de actividades del año 2013 de la sección infantil y juvenil de la BPE de Zamora se puede encontrar información más detallada de esta actividad. Muchos de estos trucos aparecen también en el libro Educando con magia, del maestro y mago Xuxo Ruiz, cuyas presentaciones son auténticos espectáculos para los pequeños y un gran descubrimiento del ilusionismo como recurso didáctico para docentes y bibliotecarios.
Últimamente, algunos magos están descubriendo el binomio magia-libros. Es el caso del ilusionista Pedro III que, con su espectáculo La magia de los libros, recorre escuelas y bibliotecas para fomentar la afición a la lectura en los niños, mostrando el libro como un elemento mágico, fascinante y atractivo, a través de una cuidada selección de títulos clásicos y actuales que sorprenden a niños y a mayores.
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Rindámonos a la magia de y en los libros y veremos como, por arte de birlibirloque, niños, jóvenes y adultos se convierten en apasionados lectores. ¡Que empiece el espectáculo!