Las bibliotecas buscan nuevas formas de financiación e ingresos

Bien es sabido por todos la situación por la que están pasando las bibliotecas a nivel económico y que repercuten directamente, no solo sobre el personal bibliotecario y los servicios que se ofrecen, sino también sobre el bien más preciado de una biblioteca: sus usuarios. Parece todo un complot contra el mundo bibliotecario donde estorba esta institución que tan buen servicio da a la sociedad… aunque algunos no se enteren o miren hacia otro lado.

Ante esta situación, a las bibliotecas no les queda otra que intentar buscar nuevas alternativas de financiación y de adquisición de materiales para ponerlos a disposición de las personas. Un claro ejemplo de esto son las tres iniciativas llevadas a cabo por la Biblioteca Pública Casa de las Conchas donde piden donaciones de materiales imprescindibles que se esperan encontrar en una biblioteca, donde piden donaciones de materiales (libros, discos, dvds) que se tengan en casa y los usuarios se quieran deshacer de ellos y donde piden dinero (directamente) a los usuarios de las bibliotecas para poder comprar los materiales.

Pago bibliotecas (imagen de Julián Navarro para BiblogTecarios)

Muchas fueron las críticas recibidas a las bibliotecas municipales de Zaragoza por cobrar 4,40 euros por los carnés de las bibliotecas:

«A partir del 1 de septiembre de 2012, en las bibliotecas municipales se aplicará la ordenanza fiscal nº11 en lo relativo a la expedición de carnés de socios. La expedición del carné tendrá un coste de 4,40 euros. Excepto en el caso de las personas que estén en posesión de tarjeta ciudadana. No está contemplada ninguna otra excepcionalidad»

Esta iniciativa puede llegar a ser un arma de doble filo. Por un lado se está privando del acceso a la información a las personas que no puedan pagar esa cantidad de dinero, pero por otra se está consiguiendo un dinero que no viene por parte de la Administración pública (¡y que tan mal está para temas relacionados con la cultura!). Vamos, este es un caso que habría que ver más despacio y si realmente ese dinero va para las bibliotecas o se “pierde” parte de esa cantidad por otros lados.

Otro caso de financiación fuera de los cauces “normales” está nombrado en el Plan Estratégico 2012 – 2014 de la Biblioteca Nacional de España, la cual busca a través de los micromecenazgos poder reducir los costes que tiene la institución. Este sistema se basa en la contribución económica voluntaria por parte de las personas que quieran apadrinar alguna obra de la biblioteca, ayudar a su restauración o mantener las salas de lectura.

Por ahora solo he hablado del matrimonio biblioteca – usuario en cuanto al sustento económico de la primera para que repercuta en los usuarios a través de los materiales adquiridos y los servicios realizados, pero… ¿por qué no pensar en un matrimonio biblioteca – empresa privada? Aunque bien es cierto que la empresa privada sigue el mismo camino que el mundo de las bibliotecas (¡la crisis!), puede que sea el momento de buscar alianzas y ver cómo se pueden beneficiar las unas de las otras. ¿Por qué no buscar alianzas con las editoriales o con cualquier otro sector del cual poder obtener beneficios?… os dejo en el siguiente enlace una pequeña idea: La biblioteca como nuevo espacio de ventas.

Tras exponer estos cuatro casos de financiación extra de las bibliotecas (donativos, cobrar por carné, micromecenazgo y financiación privada) tenemos que valorar lo que realmente queremos y nos gustaría que fuese nuestra institución. Si de verdad queremos que las bibliotecas salgan a flote y sigan ofreciendo servicios de calidad no hay que tener miedo a la empresa privada ni a buscar nuevas formas de financiación a través de nuestros usuarios.

Nos encontramos ahora mismo en la siguiente situación: morir lentamente por no tener los ingresos por parte de la administración o tratar de salvar la institución buscando otras (nuevas) alternativas.

Seguro que conocéis más iniciativas como estas donde las bibliotecas intentan conseguir financiación para poder dar un mínimo servicio de calidad a sus usuarios. Me gustaría que las compartáseis en los comentarios y me contaseis qué os parecen este tipo de iniciativas. Y si estás implicado en alguno de estos casos expuestos anteriormente me gustaría saber vuestra opinión y el funcionamiento de las mismas.

Julián Marquina

Community Manager de Baratz-Servicios de Teledocumentación, donde me encargo de la gestión, comunicación y dinamización de las redes sociales de la empresa así como de buscar nuevas líneas de comunicación y participación. Escritor del libro: Plan Social Media y Community Manager y del Informe APEI: Bibliotecas ante el siglo XXI: nuevos medios y caminos. Director de RecBib – Recursos Bibliotecarios y creador y fundador de las plataformas de blogs del sector de la Información y Documentación: BiblogTecarios e InfoTecarios. Desde hace unos años conferenciante y profesor de temas relacionados con el tema del social media, el community manager y las bibliotecas. Diplomado en Biblioteconomía y Documentación y licenciado en Documentación por la Universidad Carlos III de Madrid. Miembro del Consejo Editorial del Anuario ThinkEPI, consultor en la UOC… y ahora adentrándome en el mundo del crowdfunding cultural con Mecenable.

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