El pasado 30 de septiembre de 2016 entró en vigor el Tratado de Marrakech, oficialmente denominado «Tratado de Marrakech para facilitar el acceso a las obras publicadas a las personas ciegas, con discapacidad visual o con otras dificultades para acceder al texto impreso», impulsado por la OMPI. Firmado en Marrakech, Marruecos, el 28 de junio de 2013, se centra en las excepciones al derecho de autor, con el fin de facilitar la creación de versiones de libros y otras obras protegidas que sean accesibles para personas con discapacidad visual.
La UMC afirma que el objetivo es poner fin a la hambruna de libros que se enfrentan las personas ciegas, discapacitadas visuales o que de alguna otra manera tienen dificultades para acceder al texto impreso.
En la actualidad, de los libros que se publican en el mundo, sólo se llegan a producir en formatos accesibles de un 1 a un 7%. Esto se debe en parte a las barreras de acceso impuestas por las leyes de derechos de autor. Y menos del 10% se ponen a disposición de los 285 millones de personas ciegas o con discapacidad visual que hay en todo el mundo, de los cuales el 90% vive en países en desarrollo.
Importantísimo es que mediante este acuerdo se crea un régimen internacional de importación y exportación para el intercambio de libros accesibles a través de las fronteras. Y es aquí, donde las organizaciones no lucrativas, las bibliotecas, las instituciones educativas y los gobiernos juegan un papel fundamental en la provisión de los libros accesibles. Otras consecuencias positivas son: el lograr una mayor sensibilización, permitir un mayor acceso a la información y cultura, educación, etc.
Algunos enlaces interesantes para profundizar:
– Texto completo del tratado: http://www.wipo.int/treaties/es/text.jsp?file_id=302979
– Una guía de EIFL destinada a bibliotecarios para entender el tratado: http://www.eifl.net/resources/marrakesh-treaty-eifl-guide-libraries-english
