Asociacionismo VS Colegio profesional de gestores de la información

Cuando en una época determinada de nuestra vida, nos toca elegir la carrera profesional que queremos desarrollar hay muchos aspectos a tener en cuenta, lo que siempre has querido ser de pequeño, influye la nota de corte, las expectativas de futuro, el trabajo que se puede desempeñar, el salario…Nosotras elegimos la diplomatura de biblioteconomía y de documentación, posteriormente la licenciatura de documentación y luego hemos seguido más allá, estamos con el máster y encaminando el doctorado…

UnionUna de las preocupaciones principales para muchos colegas que hayan estudiado lo mismo, y desarrollen su vida laboral en bibliotecas, archivos y centros de documentación, ya sea en el sector público o privado es la visibilidad y la poca importancia que se da al tema documental, muchas veces tratado en listas de distribución, foros, boletines.

Creemos que para que nuestra profesión esté en igualdad de condiciones, al resto de profesiones es necesario que se cuente con un colegio profesional, entendiendo dicho colegio oficial como un organismo oficial o corporación de derecho público, que tenga como esencia y objetivo cumplir una función pública o servicio, por lo que el colegio siempre estará sometido a determinadas normas de carácter público.

Cómo miembros activos también de asociaciones, entendemos que es cierto que al igual que una asociación, un colegio profesional no deja de ser una asociación de carácter privado, donde hallamos ciudadanos privados con un determinado fin: LA DEFENSA DE LOS INTERESES PROFESIONALES. Pocas son las asociaciones que se preocupan de esta premisa, de la defensa de la profesión, de la visibilidad de la misma y de la unión a esta profesión de determinadas titulaciones universitarias que la representan.

El colegio profesional tiene el apoyo del Estado, ya que además el colegio profesional persigue un fin de interés público como es el garantizar que el ejercicio de determinadas profesiones se realiza adecuadamente. A su vez se implica el beneficio de todos los ciudadanos que reciben los servicios prestados por los colegiados. Creemos que la necesidad de un colegio profesional es actualmente imprescindible, ya que las prerrogativas legales que el Estado concede a un colegio, serían:

  • la capacidad de definir normas deontológicas (incluso con la capacidad para sancionar a los profesionales que violen la buena conducta),
  • tener capacidad de certificar trabajos realizados por los profesionales y
  • la capacidad para ofrecer profesionales para funciones de interés social.

Una vez explicada dicha necesidad, debemos tener en cuenta que no pueden existir dos colegios de la misma titulación en la misma zona geográfica; pero sí pueden existir tantas asociaciones profesionales como se quiera; por lo que deberemos interpretar que la creación de un nuevo colegio profesional en una zona geográfica no altera el mantenimiento de asociaciones profesionales que se dirigen al mismo sector profesional.

Creemos que lo importante es ayudar a la sociedad a controlar, gestionar y eliminar duplicidad de la cantidad ingente de información y documentación que se genera en nuestra sociedad actual, la sociedad del conocimiento. Por ello y muchas más razones es importante que haya un colegio profesional, y asociaciones, pero que se deben de mejorar dichas funciones y servicios que se ofrecen a los socios. Las asociaciones tienen como base fundamental el reciclaje de los profesionales, pero no hay implicación directa a la problemática que actualmente existe en nuestro ámbito profesional, o por lo menos no lo ha habido durante mucho tiempo.

Esto afortunada y lentamente está cambiando, recordemos la #mareaamarilla que se celebró el pasado 4 de Febrero con la actividad simbólica del abrazo a la BNE, cuando ciertas asociaciones de gran prestigio en el ramo mostraron su incondicional apoyo, como por ejemplo SEDIC, convirtiéndose en un punto de venta.

Ahora, en estos momentos, tenemos varios campos (se podría decir de batalla) abiertos en nuestra profesión, junto con la reforma laboral y el recorte en bibliotecas, nos enfrentamos a la responsabilidad de la gestión documental que afecta a los archiveros y documentalistas e incluso nos enfrentamos a las propuestas locales hilarantes de un Ayuntamiento, el de Madrid, que propone programas pilotos en los que se incluyen voluntarios en las bibliotecas, voluntarios que no realizarán funciones técnicas, en un principio, pero que sí ponen el alma en vilo a los profesionales de las bibliotecas. Aquí es entonces cuando echamos en falta las movilizaciones de las Asociaciones, la representación y defensa de la profesión, es aquí donde observamos la clara orientación a los asociados y la “poca” defensa por la profesión. Y es que el promover el reciclaje entre profesionales con contenidos un tanto desfasados y a un alto importe no es defensa de la profesión, al menos desde nuestro punto de vista. Tómese como crítica constructiva.

No existe un campo de batalla entre asociaciones y colegios profesionales, al menos así no se ve desde el lado de los colegios profesionales, sin embargo para continuar con el debate, así lo sienten ciertas asociaciones, las que luchan por el intrusismo, como lucharía un colegio, recelosos sin motivos, nos ven como intrusos. Pero hay que dejar claro, que la unión hace la fuerza y que si una premisa tenemos clara es la de UNIR ANTES QUE SEPARAR. Al igual que evoluciona la profesión han de evolucionar los entes que la representan, ni nosotras somos sólo archiveras, ni sólo bibliotecarias, ni sólo documentalistas, ni un archivero se representa con correspondencia y balduque, ni un bibliotecario por fichas catalográficas, ni un documentalista por recuperar información de servicios de pago inalcanzables a los usuarios de a pie.

Si hablamos de los movimientos procolegio actuales en algunas comunidades tenemos en Madrid la Plataforma COABDM que luchan por la creación del colegio profesional, cómo lo hicieron en su momento Col•legi Oficial de Bibliotecaris-Documentalistes de Catalunya y el Col•legi Oficial de Bibliotecaris i Documentalistes de la Comunitat Valenciana. E intentos en Murcia, Aragón y Castilla La-Mancha que esperemos que pronto vean la luz.


Marta GarcíaMarta García Rodríguez. Diplomada en Biblioteconomía y Documentación y Licenciada en Documentación por la UCM. Actualmente trabajo en un servicio de extensión bibliotecaria y soy profesora del curso on line de catalogación de material cartográfico moderno en la empresa DMS Group. Mi vida laboral se centra principalmente en el mundo de las bibliotecas, aunque como casi todos he trabajado en todas las ramas de nuestra profesión, incluso ¡siendo locutora de radio!. Me encanta viajar y “hacer fotos a mi manera” 😉

Rosa PintadoRosa Pintado Grande. Diplomada en Biblioteconomía, Licenciada en Documentación y Máster en Documentación. Actualmente soy Técnico de Bibliotecas en Velilla de San Antonio. Identidad Freak y Geek por excelencia, cabezota reconocida y despistada por herencia. He pasado por casi todos los ámbitos que nuestra titulación nos permite y que las tecnologías muestran, pero quiero más.

Firmas invitadas

Firmas invitadas a BiblogTecarios. Personas relevantes del mundo de la Información y Documentación que han colaborado con nuestro blog. Si quieres ser firma invitada, contáctanos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *