Actividades inclusivas en la biblioteca… ¿Por dónde empiezo?

Las bibliotecas públicas ofrecen multitud de actividades: presentaciones de libros, exposiciones, clubs de lectura, talleres relacionados con las TIC, cuentacuentos, conferencias…
En muchas ocasiones incluyen algunas más propias de centros cívicos y sociales como clases de baile, de cocina, conciertos o sesiones de yoga… Por un lado por la evolución de las bibliotecas y por otro por ser dichas bibliotecas sede de ambos servicios públicos de la población.
Pero, ¿cuántas de estas actividades que se ofrecen son accesibles a todos los ciudadanos?

Por desgracia, la respuesta es pocas, o ninguna…

¿Qué és una actividad inclusiva?

Una actividad inclusiva es la que su accesibilidad ofrece igualdad de oportunidades y en las mismas condiciones a todos los ciudadanos, tengan o no discapacidad.

Hablar de actividad accesible no se limita a las que se programan específicamente para colectivos de personas con discapacidad: un club de lectura dirigido a personas con discapacidad cognitiva, una visita a la biblioteca interpretada en lengua de signos o una sesión de lectura en voz alta para personas con discapacidad visual.

Una actividad accesible es la que tiene presente las necesidades de todos los usuarios incluyendo a los diferentes colectivos con discapacidad y cubre estas necesidades con los apoyos necesarios en cualquier actividad que se programe.
Lo que sucede es que generalmente no se piensa en ellos y se tiene la impresión de que ofrecer una actividad inclusiva cuesta mucho dinero, pero en muchas ocasiones no es así y la gran mayoría de veces se pueden hacer más accesibles mediante pequeñas acciones.

En una entrada que realicé hace unas semanas: Biblioteca inclusiva… ¿Por dónde empiezo? y solo se trata de «cambiar el chip». En ella expresaba algunas de las preguntas que debemos hacernos siempre que iniciemos un nuevo servicio o actividad en la biblioteca… Una lista inacabada a la que podríamos añadir una pregunta:

¿Si ofrecemos actividades inclusivas, se llenaran las bibliotecas de personas con discapacidad?

La respuesta es clara y directa: no
No podemos pretender que los colectivos de personas con discapacidad que hasta ahora no tienen como referente a las bibliotecas como espacios de encuentro. Por contra, desde siempre, las bibliotecas han sido equipamientos públicos donde no han encontrado servicios dirigidos a ellos o con los recursos necesarios para ser accesibles, ni documentos adaptados (o no se renuevan, o los desconocen), ni actividades que cubran sus necesidades básicas de acceso a la lectura, a la cultura y a la información.
Entonces, si un dia organizamos una actividad inclusiva… De repente y como por arte de magia, ¿alguien puede pensar que invadirán nuestros equipamientos?

Como comentaba en la anterior entrada, es necesario empezar a trabajar hacia la inclusión. Asegurar que la cadena de accesibilidad no se rompe al entrar en la biblioteca y ofrecer dentro de la normalidad servicios y actividades accesibles a todas las personas, tengan o no discapacidad.
Una vez conseguido, los diferentes colectivos (si son informados) empezaran a fidelizar el uso y disfrute de los equipamientos bibliotecarios, los servicios y actividades que se ofrecen y los fondos documentales que cubran sus necesidades lectoras, culturales y de información, como el resto de la población.

Tres actividades habituales en bibliotecas que podemos hacer más accesibles a colectivos de personas con discapacidad:

Se deberá tener presente que la difusión además de llegar a los diversos colectivos, se deberá ofrecer de manera accesible: además del formato en papel y multimedia habitutal, en audio, multimedia accesible, Lectura Fácil, apoyo de pictogramas, braïlle… (los formatos dependeran del público al que queramos llegar).