¿Quién dice que las bibliotecas son un lugar de silencio y calma? Hace ya mucho tiempo que las bibliotecas han dejado de ser solamente el sitio al que la gente va a tomar prestados libros. Hoy en día, la mayoría intentan hacerse un hueco con actividades culturales entre las que destaca la música.
Ya en 2006, Carme Fenoll y Ciro Llueca en Cincuenta ideas para sorprender desde la biblioteca pública proponían la utilización de la música como hilo musical en las bibliotecas ya sea como señal del horario de cierre, durante todo el horario de apertura o en momentos puntuales como el día en el que se incorporan las novedades del mes. También el compañero Evelio se servía de la música en su post 25 ideas más para sorprender desde la biblioteca pública, con iniciativas como Literary Jukebox que empareja de música y literatura o Geographical Jukebox que hace lo propio con música y lugares. También en su entrada podemos encontrar novedosas ideas como promover la creación de listas musicales que inviten a la participación y reflexión del público.
Muchos os preguntareis por qué las bibliotecas tienen que ofrecer ningún servicio relacionado con la música. Como muy bien dice Francisco Moreno en su artículo La música y las nuevas tecnologías en las bibliotecas públicas: el caso de la Xarxa de Biblioteques Municipals de Vilanova i la Gestrú, los bibliotecas tratan de “garantizar el acceso a la información, la formación y el ocio a todos y todas los/las ciudadanos. La música, entendida como fuente de cultura y ocio, de transmisión de valores y de tradición tiene que formar parte de los fondos.” Dado que la venta de CDs está en retroceso y los usuarios se decantan cada día por la música en línea, las bibliotecas deben empezar a utilizar estas nuevas tecnologías como la música en streaming para ganar en visibilidad y accesibilidad y conseguir nuevos usuarios. Existen numerosas plataformas de música online que pueden ser utilizadas por las bibliotecas como Soundcloud, Deezer, Bandcamp, aunque la más conocida de todas es Spotify.
Actualmente, el uso de este tipo de plataformas de música en streaming es habitual en muchas de las bibliotecas del Ajuntament de Barcelona y de la red de bibliotecas públicas de Catalunya y en bibliotecas universitarias como la Biblioteca del Campus de Terrassa de la Universitat Politècnica de Catalunya y la Biblioteca de la ETSI de Telecomunicación de la Universidad Politécnica de Madrid.
¿Qué usos se puede hacer de Spotify en las bibliotecas?
- Unión de literatura y música: Como ya decía Evelio, existen algunas iniciativas que relacionan literatura y música. Ya sea a través de canciones inspiradas en obras literarias o bandas sonoras creadas por los propios autores para acompañar sus libros, las bibliotecas podrían realizar listas de reproducción para que esta música llegue a sus usuarios. También podría ser interesante crear playlist colaborativas en las que los usuarios puedan añadir canciones que les sugieren determinadas obras.
- Unión de lugares y música: Al igual que muchas bibliotecas ofrecen colecciones que nos permiten descubrir nuevos lugares, preparar viajes o, simplemente, viajar con la imaginación, se puede utilizar la música para conseguir que ese viaje sea más completo. Para ello se puede utilizar música tradicional del país o la zona, los éxitos más conocidos del lugar o canciones que le hayan dedicado. Con un poco de investigación en fuentes de información fiables, conseguirás que tus usuarios se transporten momentáneamente a cualquier lugar.
- Exposiciones y días señalados: Con motivo de fechas señaladas o días internacionales, la biblioteca suele organizar exposiciones sacando a la luz parte de sus fondos especializados en esta temática. ¿Por qué no añadir también en esta selección una lista de música que trate sobre esa temática? Por ejemplo, en un 21 de marzo, Día Mundial de la Poesía, ¿por qué no realizar una lista de reproducción con versiones musicales como Cantares de Joan Manuel Serrat, Palabras para de Julia de Los Suaves o Annabel Lee de Radio Futura?
- Pon banda sonora a tu vida: Una idea que ya se empieza a ver en algunos medios de comunicación es que un personaje conocido seleccione una lista de canciones que le han marcado en su vida y explique por qué las ha elegido. Las bibliotecas usar este formato para dar importancia a sus usuarios y conseguir una mayor colaboración. Consistiría en que un usuario que tenga una buena relación con la biblioteca eligiera un número determinado de canciones (entre cinco y diez para que no sea ni demasiado corta ni demasiado larga), realizar una lista de reproducción con ellas y que el usuario explique por qué las ha seleccionado y qué recuerdos tiene. En esta explicación habría que utilizar otra plataforma social más allá del streaming como el blog, redes sociales o incluso, si se quiere mantener el formato audio, otras plataformas sonoras que permiten subir nuevas grabaciones de audio como Soundcloud o Mixcloud.
- Estudia o trabaja pero con música relajante: Según algunos estudios, estudiar o trabajar con música facilita la concentración. Aunque cada uno tenga sus preferencias, se dice que no vale cualquier tipo de música ya que los ritmos repetitivos o, al contrario, los muy complejos, no ayudan a la concentración. Con estos mimbres, no es de extrañar que muchos usuarios busquen una banda sonora para sus días de estudio y concentración. La biblioteca puede solucionar las necesidades de muchos de sus usuarios de golpe con ofreciéndoles una lista que ayude a que sus días de estudio sean menos duros.
- Estudia idiomas con la biblioteca: Uno de los objetivos que todos nos ponemos al empezar un nuevo curso o como propósito de año nuevo es aprender idiomas. Muchas bibliotecas ya ayudan en esa formación a través de libros de aprendizaje en otras lenguas o manuales de método. Pero, además de estas acciones, cualquier estudiante de una lengua extranjera sabe que uno de los aspectos más importantes es ‘abrir el oído’, es decir, escuchar a personas hablar en ese idioma consigue que poco a poco tu cerebro se active y empiece a entender palabras y expresiones. A través de playlist especializadas en diferentes idiomas, las bibliotecas pueden ayudar a sus usuarios en la formación, tanto para los que están empezando con un idioma como para los expertos que quieren no perder su dominio.
- Música de cine (y de series): Al igual que las bibliotecas garantizan el ocio de su público adquiriendo DVD de películas y series que en muchos casos son ampliamente deseados por los usuarios y llegan a amplias disputas en las listas de reservas, se les puede ofrecer listas de reproducción con las canciones que suenan en ellas para que la espera sea menos dura o para que rememoren los grandes momentos que pasaron con ellas.
- Descubre a los “artistas de cercanía”. Como ocurre con los alimentos que compras en el supermercado, es muy probable que si miras a tu alrededor tengas a nuevos músicos que empiezan a destacar y se mostrarían encantados ante cualquier promoción que la biblioteca pueda hacer de ellos. La idea de buscar a músicos locales, dedicarles un mes a cada uno, por ejemplo, hablando con ellos en los canales de comunicación social de los que disponga la biblioteca, promocionando su música o, como ya decían Carmen Fenoll y Ciro Llueca hace diez años, encargándoles el hilo musical.
Como veis, hay muchas razones por las que utilizar este tipo de plataformas musicales en las bibliotecas. ¿Conocéis alguna biblioteca que le dé algún otro uso?
Fuentes consultadas:
Fenoll Clarabuch, Carme; Llueca Fonollosa, Ciro (2006). Cincuenta ideas para sorprender desde la biblioteca pública. BiD: textos universitaris de biblioteconomia i documentació, núm. 17 (desembre). Disponible en: http://bid.ub.edu/17fenol2.htm
Jerez, Fernando (17 de diciembre de 2014). Lectura y Spotify: 5 playlists de libros, autores y bibliotecas. [Artículo de blog]. Recuperado de http://www.elmundowebsocial.com/2014/12/lectura-y-spotify-5-playlists-de-libros.html
Moreno Espejo, Francisco (2015). La música y las nuevas tecnologías en la bibliotecas públicas: el caso de la Xarxa de Biblioteques Municipals de Vilanova i la Geltrú. Boletín de la Asociación Andaluza de Bibliotecarios, N° 109, Enero-Junio 2015, pp. 84-93. Disponible en: https://www.aab.es/app/download/24418572/Valverde.pdf
Pérez Anllo, Raquel (2015). ¿Cuál es el futuro de la música en el ámbito de las bibliotecas? [Artículo de blog]. Recuperado de http://diarium.usal.es/experimentrado/pasarelas/en-espanol/bibliobsession/cual-es-el-futuro-de-la-musica-en-el-ambito-de-las-bibliotecas/
Para música de cierre yo propondría «adiós amigo» de Raffaela Carrá, por eso de además mezclar idiomas…pero me temo que entre los usuarios causaría «controversia»
A mí me parece una sugerencia estupenda, es una canción de despedida, animada, que mezcla temas y genera bastante buen rollo en general. Ahora bien, hay que conocer a los usuarios y valorar cómo les sentaría. 😉
Sandra,
En Japón, a nivel nacional, en multitud de tiendas y comercios ponen «Auld Lang Syne», y todos sabemos que van a cerrar cuando se escucha.
Pongo un ejemplo:
https://www.youtube.com/watch?v=o7GxffUu7p0
No estaría mal decidir una canción chula a nivel de red de Bib Públicas de una ciudad, por ejemplo, hacer una encuesta, una buena ocasión para comunicarse con los usuarios, …
Jorge
Me parece una idea estupenda, Jorge. Desconocía este caso de Japón. Sería difícil encontrar una canción tan bonita y tan relajante como esta. Se podría hacer una consulta entre los usuarios para seleccionar una canción existente o, incluso, convocar un concurso entre los autores locales.
S.
En la Biblioteca de Xàtiva (Valencia), cada quince días hacemos recomendaciones de 2 libros, 2 DVD y 2 CD. Ponemos el material en un atril y lo anunciamos en la web.
Diez minutos antes de cerrar la sala ponemos música, y aprovechamos para dar a conocer los CD que estamos recomendando.
Hola Cristina!
¡Qué buena manera de promocionar la música y los CD de los fondos! ¿Y tienen éxito? ¿Los usuarios se los llevan en préstamo? xD
Un saludo
Buenos días Sandra!
Pues la verdad es que sí, tienen éxito, claro que en menor medida que los DVD o los libros, pero sí, se prestan e incluso hemos tenido usuarios que nos han pedido un listado con los últimos recomendados. Intentamos que sea música «poco comercial», rarezas o reediciones. Te envió un enlace con las últimas recomendaciones. Al pinchar en los títulos aparece una reseña de cada obra.
Saludos!!!
http://biblioteca.ayto-xativa.es/es
Me encanta cómo promocionáis esa música «poco comercial», ya que no sólo lo colocáis en un estante de novedades sino que lo ponéis para cerrar la sala y escribís una reseña en la web. Lógico que sea reconocido por los usuarios, se los lleven y os pidan los listados. Yo también lo haría.
Un saludo
Sandra
¡Que buen post!
En mi biblioteca se realizarà una exhibición de los CD con los que se cuenta en la Colección. La idea es promover la música con la que cuenta la biblioteca. Sin embargo, aun no tenemos claro como hacerlo. Por generos, por regiones, por artistas, por lo tanto me gustarìa escuchar sugerencias, e ideas que puedan ser adaptadas a nuestra exposición.
Muchas gracias,
Mi correo es jfrancisco.cardona@gmail.com
Buenas tardes Jesús Francisco:
Me parece una gran idea realizar una exposición que permita dar visibilidad a los CD. Dependiendo del tamaño del fondo que tengas y la variedad temática se podrían organizar de diferentes maneras. No sé si os lo habéis planteado pero, ¿por qué no hacer diferentes exposiciones temporales temáticas? Así, dependiendo de lo que tengáis, una vez la dedicáis a un artista con muchos fondos, otra vez a la música de una determinada región, etc. Además, podríais incorporar otros soportes documentales como libros o DVDs que estén relacionados con el tema. Bien es verdad que conllevará mucho más trabajo por parte del personal pero sería una manera estupenda de hacer visible la colección.
Un saludo
excelente muchas gracias por la información