Entre el 20 y el 22 de octubre pasados, tuvo lugar en Ávila el 8º Congreso Nacional de Bibliotecas Móviles que bienalmente organiza la Asociación de Profesionales de Bibliotecas Móviles, esta vez de la mano con la Diputación de Ávila.
Bajo el lema “Bibliobuses: tanto con tan poco”, se trabajó sobre propuestas y realidades tendentes a probar que los bibliobuses, como equipamientos destinados a la población más vulnerable, cambian la vida de sus usuarios y pueden incidir activamente en el desarrollo de sus comunidades.
No es casualidad que el cartel del Congreso representara a un bibliobús aparcado entre los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU; de hecho, fue el ejemplo de las Bibliotecas Públicas Móviles colombianas el que inauguró las sesiones de la mano de Consuelo Gaitán, Directora de la Biblioteca Nacional de Colombia, quien puso de manifiesto el éxito de estas veinte bibliotecas como ejes del desarrollo de las zonas abandonadas a su suerte durante los cincuenta años de guerra, y que ahora se pretenden levantar casi de la nada, como exponente de un nuevo país, cuyo punto de partida son las dotaciones móviles bibliotecarias establecidas para ello.
Un nuevo ejemplo sobre lo mismo, que también está funcionando con éxito, fue el del Bibliomóvel portugués de Proença-a-Nova, expuesto por su bibliotecario, Nuno Marçal, que ha conseguido convertir su biblioteca móvil en un centro de recursos y servicios para las comunidades que visita, convirtiéndose también en un auténtico dinamizador social. Es significativo cómo, en diez años de existencia, su biblioteca ha evolucionado desde un simple punto de préstamo y consulta a un centro de servicios en los que se incluyen talleres de ciencia para los mayores, entretenimiento y revitalización de las residencias de ancianos, ventanilla única ambulante de su municipio, operaciones de telebanco mediante datafono, e incluso revisiones médicas básicas.
En esta línea no podían faltar tampoco las disertaciones teóricas sobre algunas de las técnicas para conseguir estos logros, como fueron las activas y cautivadoras exposiciones de Felicidad Campal en favor de la formación digital crítica desde las bibliotecas, y de Ana Ordás en defensa de la gamificación como un instrumento para llegar a los usuarios y fidelizarlos al servicio.
El apartado de comunicaciones presentó una mayor variedad temática, si bien siguió incidiendo en el papel de la biblioteca móvil para la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible: Faustino Grande hizo un repasado a los treinta años del Servicio de Bibliobús de Ávila; el bibliotecario portugués Rui Guedes nos describió la Biblioteca Municipal de Penafiel y su Bibliomóvel; el peruano Heber Ocaña presentó su servicio de Bibliomoto en el asentamiento humano de Santo Domingo, en la provincia de Huarmey; y Mari Mar Agós y Martín Saragueta defendieron el Proyecto Berragu, que desde la Biblioteca de Espinal-Aurizberri extienden por los valles navarros del Pirineo.
Todos los casos anteriores presentaron coincidencias tales como un nacimiento sensible a unas necesidades acuciantes difíciles de atender sosteniblemente con medidas tradiconales, y para lo que los medios a su disposición no fueron sobrados; sin embargo, otro punto de coincidencia era su gran acogida por parte de la población, sobre la que enseguida se empezaban a apreciar sus efectos y la que no tardó, a su vez, en hacer suyos estos servicios.
Otras comunicaciones presentadas obedecieron a temas más puntuales, como el caso de Isabel García Sánchez, con un pionero análisis sobre la utilización de las redes sociales en los bibliobuses españoles; o la exposición de César Díaz Hilario sobre un modelo metodológico para la implantación de nuevas paradas, como la de Arroyoculebro en su bibliobús de la Comunidad de Madrid, que ejemplificó el tema; también las positivas impresiones de sus alumnos sobre el Bibliobús de Ávila fueron el centro de la intervención de la profesora Mª Nieves Alonso Gómez; asimismo Óscar Calzado desveló los arduos entresijos en la concepción del Juego del Bibliobús de los Bibliobuses de León; y por último también hubo un momento para la historia de los bibliobuses de la mano de Javier González Cachafeiro, con el análisis del catálogo de la Biblioteca Circulante de la Escuela Sierra Pambley de Villablino (León), de los años 30, cargada de un amplio bagaje institucionalista.
Como suele ser habitual, la edición de este año del Congreso Nacional de Bibliotecas Móviles concluyó con la ceremonia de entrega de los Premios ACLEBIM, que cada dos años pretenden resaltar la labor de personas, instituciones y servicios que se señalan en favor de los servicios bibliotecarios itinerantes.
En esta edición, como no podía de ser de otra manera, se valoran especialmente las acciones encaminadas al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible en las bibliotecas móviles, es decir, aquellos ejemplos en los que nuestras bibliotecas se han convertido en un instrumento fundamental para conseguir importantes cuotas de desarrollo en sus propias comunidades. Así los premiados fueron la Bibliotecas Públicas Móviles de Colombia, el Proyecto Berragu de Navarra y la acción en favor de los bibliobuses de su provincia de la Diputación de Toledo.
La laboriosidad que supuso la sucesión de ponencias y comunicaciones, seguidas con gran interés y participación por los congresistas, no fue obstáculo para la profusión de actividades extraacadémicas tales como la exposición fotográfica Enfocando al Bibliobús, cedida por la Asociación de Fotógrafos Leoneses y los Bibliobuses de León, la exposición de ocho bibliobuses españoles y portugueses en la misma muralla de Ávila, la teatralización del cuento El circo de los cuentos, de José Carlos Andrés González (Ed. Amigos de Papel), la dramatización del último libro de Gonzalo Moure, por él mismo, El silbo del dromedario que nunca muere (Ed. Lóguez); o la visita turística al yacimiento arqueológico Castro de Las Cogotas.
Fueron tres días de muchas emociones, de reencuentros, de intercambio valioso de conocimientos y noticias, de nuevos descubrimientos y en suma de fortalecimiento de la Gran Familia de los Bibliobuses, cada día más libre de las fronteras.
Ponencias y comunicaciones en texto completo.