Si viajas a Santander, es de obligada parada visitar, la Biblioteca de Menéndez Pelayo. Situada en una zona muy céntrica, cerca del Ayuntamiento, cuenta con un edificio clásico muy bello y en su interior alberga obras muy interesantes por su antigüedad y singularidad. Incluso existen muchas obras de primera edición.
Antes de pasar al interior de la Biblioteca, en la sala de recepción, se proyecta un vídeo que nos cuenta la historia de la biblioteca, la casa donde residía y aspectos diversos e importantes sobre la vida y obra del autor. En él se muestra la figura de Menéndez Pelayo como toda una vida dedicada al saber y el conocimiento, así como a la lectura.
Nada más entrar en la biblioteca, te produce un gran impacto visual por lo bonita que es, las vidrieras del techo, su arquitectura clásica, sus estanterías repletas de libros, etc. Se puede visitar de lunes a viernes, de 09.30 a 11.30h y la entrada es gratuita. Lo que es hoy en día la biblioteca, eran los jardines de la casa de Menéndez Pelayo pero como ya no le cabían los libros en su casa, su padre le hizo este lugar, para guardarlos. Frente a la escalinata que alberga la biblioteca se encuentra la estatua sedente del literato, realizada por Mariano Benlliure.
A pesar de ser pequeña pero imponente, conserva la importante colección bibliográfica de Marcelino Menéndez Pelayo, formada a lo largo de su vida (1856-1912) y donada a la ciudad de Santander por el escritor, destacando la famosa Crónica Troyana, de finales del S.XIII-comienzos del S. XIV, bellamente iluminado o manuscritos de Quevedo, Lope de Vega.
Entre su fondo bibliográfico se halla 22 incunables y sus estanterías contienen la colección de 45.000 libros.
La consulta de los fondos de la biblioteca es libre para investigadores, previa formalización de la ficha correspondiente que se facilita en el centro. Dispone de 20 puestos de lectura y son significativos los repertorios bibliográficos. Además son abundantes los textos de los clásicos, entre ellos se cuenta con las ediciones griegas de Didot o las latinas de Valpy y Lemaire.
En definitiva, es una de las más importantes bibliotecas españolas de humanidades y pertenece al grupo de especializadas y de investigación con gran valor patrimonial.
Tras fallecer el escritor en 1912, el Ayuntamiento de Santander acoge el generoso legado, de edificio y colección de libros, dispuesto así en el testamento del autor.
Después de contemplar esta magnífica biblioteca se accede al exterior por la parte trasera de la biblioteca, para hallar un patio o jardín con bustos de diferentes personalidades, escritores y la casa familiar.
Respecto a la casa de la familia Menéndez Pelayo, cabe decir que es una construcción de tipo afrancesado, realizada en 1876. En su interior pueden contemplarse las diferentes dependiencias: comedor y sala de estar en la planta baja y, en el piso superior, el despacho de Enrique (hermano de don Marcelino) y la habitación . La casa fue adquirida por la Sociedad Menéndez Pelayo a la viuda de su hermano Enrique y desde entonces su labor ha sido de gestionarla como museo. La entrada es gratuita y el visitante puede apreciar la buena conservación del mobiliario.
Finalmente desde aquí quiero agradecer a Rosa Fernández, su directora, por su atención y amabilidad al mostrarme tan bello tesoro. Sin palabras!!. No cabe duda que esta biblioteca es un buen ejemplo de inmersión a la sabiduría y para todos los que adoramos los libros entrar en un lugar como este nos emociona.