Y el Oscar es para…

Esta pasada madrugada se han concedido los premios de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas, los Oscars 2014. Durante la entrega, se ha reconocido el trabajo de actores, directores, guionistas, responsables de vestuario, sonido, fotografía… sin embargo, y por desgracia, como de costumbre nadie se acordó del trabajo de documentación llevado a cabo en las obras cinematográficas, a pesar de ser ésta una labor que termina repercutiendo en el resto de aspectos de la película, un mal trabajo de documentación puede traer como consecuencia errores como los que nos mostraban nuestras compañeras del blog el documentalista audiovisual.

OscarEl trabajo de documentación da veracidad y credibilidad a una obra. Para un gran porcentaje de la población las obras cinematográficas son las únicas fuentes de información sobre un acontecimiento, sobre los aspectos culturales y de vestuario propios de una época, etc., cada vez es más frecuente que el individuo reconstruya su propia imagen a través del cine y la televisión, por tanto, podemos decir que estamos ante una manera de dar a conocer la historia y hay que procurar ser fieles a los acontecimientos y por ende dar la máxima importancia al trabajo documental.

Por todo lo anteriormente expuesto, desde biblogtecarios queremos reconocer el trabajo documental de algunas de las obras cinematográficas más importantes de este pasado año:

En esta película que cuenta la historia del primer barco norteamericano secuestrado en los últimos doscientos años, su director, Paul Greengrass, como documentalista que ha sido, quería veracidad en la historia, alejándose de los titulares triunfalistas sobre el rescate de los rehenes aparecidos en la prensa. Por ese motivo, el director tiene claro que “eso significa documentarnos exhaustivamente en la fase de pre-producción”. Por todo esto, aparte de basarse en el libro del Capitán Philips donde sólo se refleja un único punto de vista, se quiso llegar más allá de esa visión, para lo cual se hizo un trabajo de documentación en profundidad sobre la historia de la piratería somalí y los imperativos económicos que lo conducen. De esta manera,  identificó la merma de la pesca en aguas somalíes debido a la sobreexplotación industrial como uno de los factores que contribuyó al crecimiento de la economía de la piratería en estas costas, que anteriormente se había apoyado en un comercio pesquero que gozaba de buena salud.

También se realizó una investigación y documentación sobre la piratería somalí, con el fin de conocer la industria internacional del transporte marítimo.

Para el trabajo documental de este film, más allá de estudiar el documental “How to Survive a Plague”,  hubo un trabajo de documentación en el cual se accedió a fotografías y folletos del club, así como a documentación de las manifestaciones de los activistas. La publicación gay “The Dallas Voice” demostró ser un recurso especialmente valioso.

“Dallas Buyers Club” vuelve a retomar los años de desconcierto y terror que se sufrieron en torno al “Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida”. A través de  documentos e historias sobre los primeros años de investigación de esta enfermedad,  descubrimos cómo  a la vez que se intentaba conocer lo máximo sobre ella, se intentaba segregar a la comunidad que lo sufría.

Para llevar a cabo esta película hubo un gran trabajo de documentación sobre el programa espacial chino, algo que se hace patente en el film por el parecido entre las naves espaciales del país asiático y las reales. El propio director lo explicaba: “Hemos tenido en cuenta diseños de 2016, imaginando cómo va a ser la industria espacial en el futuro cercano”.

También la NASA proporcionó mucha documentación, incluyendo fotografías y filmaciones de archivo, material que ha sido clave para el éxito de la película. Incluso el síndrome de Kessler, el responsable de desatar el drama en la película, es un escenario propuesto por la NASA. Este síndrome, es un problema real y actual para la agencia. La gran cantidad de residuos que flotan en el espacio podría provocar un accidente catastrófico.

Joaquín Calatayud Gutiérrez

Documentalista de la llamada "generación perdida", prentendo dar mi visión sobre la situación en que nos encontramos los que salimos al mundo laboral en tiempos de crisis.

3 respuestas a «Y el Oscar es para…»

  1. Y sí comentáis algun trabajo español como el de «Blancanieves» ? que es una excelente película con excelente documentación, yo fui el documentalista, aunque esté feo que lo diga. Os puedo contar el trabajo documental si queréis… Un saludo

    1. Hola Vicente,
      Cuando escribí el post, ya se me paso la idea de hacer mención a algún trabajo español, en concreto pensé en ese momento en «Vivir es fácil con los ojos cerrados» por su reciente éxito en los Goya, finalmente no lo incluí por motivos de espacio.
      Estamos muy agradecidos por tu propuesta, ante una oportunidad así, bien se podría hacer una segunda parte de este post, reconociendo el trabajo, aquí, en España o una entrevista donde nos hablaras un poco de tu experiencia…

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