La cooperación internacional está llena de tópicos, o al menos eso nos han hecho creer. Y lo que este libro pretende es demostrar en diez interesantes preguntas cómo se ha adornado este trabajo.
Porque efectivamente, como el autor insiste una y otra vez en cada capítulo, ser cooperante es un empleo remunerado como otro cualquiera, con sus pros y sus contras. En el que también existen ERE’s , estrés laboral e injusticias.
Pero no nos equivoquemos, algunas ONG no quieren que se sepa especialmente esto. Es decir, quieren que se siga dando la imagen que se ha dado hasta ahora, de benevolencia, de ayuda a lo demás, de altruismo, porque eso es lo que da ingresos al fin y al cabo.
Se desmenuza el término “cooperación” desde sus orígenes hasta la actualidad y se guía al lector para que, si sigue interesado después de la lectura, continúe su proceso en este sector profesional, siempre de la mano de las advertencias que en todo momento da el autor.
Crítica personal:
Me ha parecido muy interesante desenmascarar por fin lo que se encuentra verdaderamente detrás de la cooperación internacional y que, tan sólo con diez preguntas el autor sepa explicarlo.
En un principio pensaba que la cooperación era simplemente inscribirte como voluntario en una ONG y, de forma totalmente altruista, ayudar a los más necesitados. Pero estaba totalmente equivocada, se trata de una profesión, se ayuda al necesitado sí, pero se crean proyectos que ayudan a la población a salir adelante (no sólo en casos de emergencia) y es un trabajo remunerado.
Además el lector podrá no sólo saber qué es la cooperación, sino servirse de este libro para si en un futuro decide ser cooperante o si simplemente quiere conocer más a fondo este “mundillo”.
Entrevista con el autor:
Insistes mucho en el libro sobre que ser cooperante internacional es un trabajo más. ¿Por qué algunas ONG quieren hacernos creer lo contrario?
La cooperación internacional es una opción profesional más. Los cooperantes han de tener unas aptitudes y formación determinadas, que además dependen del trabajo concreto que se vaya a realizar, porque como cooperante se pueden hacer trabajos muy diversos. Ahora bien, los cooperantes no son santos ni mejores personas, en líneas generales, que los que se dedican a otras opciones profesionales. Además en muchas ocasiones el trabajo de cooperación no implica un activismo ni una defensa de unos objetivos de cambio político y social, y el cooperante es un mero trabajador haciendo funciones técnicas. Más aún, en demasiadas ocasiones ni siquiera la organización está realizando esa lucha activa en defensa de unos derechos, por lo que el cooperante no pude ni decir que cumple una tarea técnica que contribuye al objetivo político global de la organización. Se puede decir que los cooperantes han de tener cierta vocación de servicio a los demás, pero como tantas otras profesiones de nuestra sociedad: médicos, enfermeros, camareros, etc.
Ahora bien, las ONG tienen en la captación de fondos privados como una de sus actividades principales para poder hacer su trabajo, lo cual incluye asegurar su supervivencia económica. Los departamentos de marketing son muy importantes en las ONG, sobre todo en las de tamaño mediano y grande. La imagen bondadosa y dadivosa de los cooperantes es la que aún mejor cala en la sociedad a la hora de dar donaciones, así que las ONG aprovechan estos mensajes para buscar ese tan necesario dinero. Es decir, muchas ONG siguen vendiendo el mensaje de la caridad y no el de la cooperación.
Desenmascaras muy bien la cooperación, ¿crees que esto anima (o más bien desanima) al interesado en adentrarse en este mundillo?
Supongo que a unos les animará y a otros les desanimará. Pero lo importante es que ambos grupos miren de forma más realista lo que se esconde detrás de la palabra cooperación, y que no entren en ella creyéndose los colores rosas con los que se la suele pintar. Porque si no ambos se desanimarán una vez que estén dentro.
El libro consta de diez preguntas clave sobre la cooperación internacional, ¿dejaste alguna en el tintero?
Muchas. Y cuando hablo del libro con sus lectores, a veces me entran de hacer una segunda parte o una segunda edición ampliada. Pero realmente quería que el libro fuese ameno, que se centrase en lo más importante, y que cualquier persona pudiese leerlo sin falta de unos conocimientos previos sobre cooperación. Y creo que lo he conseguido con estas diez preguntas.
Criticas las formas de trabajar de algunas organizaciones, ¿no crees que esto degrada la imagen de la cooperación frente al lector?
El libro tiene una parte divulgativa (donde trato de exponer con la mayor objetividad da la que soy capaz) y otra parte de crítica constructiva. En ningún momento he querido hacer daño a nadie con mis opiniones. No creo que se degrade la imagen de la cooperación, sino que se ajuste mejor a la realidad. Lo que no puede ser es que se venda lo que no es, porque al final, cuando la gente se entera que no es así por un medio u otro, se piensan que las ONG defraudan y que no son limpias. Y el otro extremo tampoco es cierto. Las ONG y los cooperantes no son ni santos ni villanos, y espero que el libro ayude a equilibrar esta imagen.
¿Va por buen camino la cooperación internacional?
La cooperación internacional, como nuestro mundo, está sufriendo unos cambios muy profundos. Y yo creo que está cambiando para mejor.