Los días 3 y 4 de marzo se celebraron en Barcelon las 14 Jornades Catalanes d’Informació i Documentació, normalmente es un evento que se solía celebrar cada dos años, aunque en esta ocasión las últimas fueron en el 2012.
Antes de empezar con la crónica-resumen nos gustaría compartir una frase de Eric Hoffer: In a time of drastic change it is the learners who inherit the future. The learned usually find themselves equipped to live in a world that no longer exists.” Que se traduciría como: “En tiempos de cambios drásticos son los aprendices quienes heredarán el futuro. Quienes han aprendido se encontrarán a sí mismos equipados para vivir en un mundo que ya no existe.” Y es que la base de un buen profesional es aquella en la que tiene que saber adaptarse, reinventarse y actualizarse: a las circunstancias, a la situación actual y a las nuevas tendencias. Y una de las maneras que tenemos para hacerlo es asistiendo a unas jornadas como éstas, ya que a parte de tratar diversos temas dentro de un ámbito profesional, se presentan proyectos y ponencias interesantes que nos pueden ayudar a entender hacia dónde vas las bibliotecas y qué podemos hacer para adaptarlas a la nueva realidad.
El nivel y la calidad de las ponencias, charlas y mesas redondas de este año eran todas muy interesantes, tanto que en ocasiones se le presentaban al propio asistente la dificultad de escoger a qué charla asistir.
Las jornadas abrieron con la bienvenida a los participantes por parte del Presidente del COBDC, Daniel Gil; Jordi Casassas, director del Ateneu Barcelonès y, Jusèp Boya, Director general de Archivos, Bibliotecas, Museos y Patrimonio.
La conferencia inaugural la llevó a cabo Gina Tost, periodista especializada en videojuegos y nuevas tecnologías donde nos explicó las ventajas de jugar a videojuegos y de la gamificación, que no es otra cosa que el empleo de las características de los videojuegos para crear una motivación. Nos enseñó algunos proyectos como el de la biblioteca de la universidad de Huddersfield, Lemontree, que básicamente consiste en que cuanto más uso haga el usuario de los servicios de la biblioteca a través de su carné de biblioteca éste irá ganando puntos que se transformarán en logros y de unos “beneficios” para el usuario.
Después de la esperada pausa café, en donde se pudieron ver a los más de veinte pósters participantes, se programaron tres actividades: en primer lugar una sesión de comunicaciones en torno a las bibliotecas universitarias, en segundo lugar una sesión de márqueting digital, un rol profesional emergente presentada por Jordi Verdura y dirigida por Javier Guallar que nos introducía en el mundo de las redes sociales y nos hacía entender por qué se utilizan tanto; y es que la facilidad con la que hoy en día se puede publicar hacer que cualquiera pueda ser un blogger dedicado a escribir/hablar/informar sobre un tema que le interese o que domine y compartirlo con el resto de internautas. En tercer lugar una sesión del grupo de trabajo de bibliotecas y cine, llamada “Bibliotecaris de cinema: som el que hem vist”.
Para terminar la mañana se nos daban tres propuestas más: Biblioteca y entorno. Roles profesionales, que se llenó considerablemente; La información, motor de evolución social e innovación, que también se llenó y; en la sala más amplia -el auditorio-, la sesión sobre Bibliotecas y lectura: el lugar de la literatura en nuestras bibliotecas, hoy. Esta última fue una charla en la cual se nos informaba de que el hábito de la lectura había cambiado considerablemente así como su consumo. En estos momentos tenemos diferentes figuras, como los booktubers que nos recomiendan lecturas a través de plataformas de vídeo como Youtube. Las bibliotecas al abrirnos a estas nuevas tendencias: no nos sirve únicamente para crear clubes de lectura o compartir todas aquellas actividades que se llevan a cabo a través de redes sociales como Twitter o Facebook: debemos encontrar métodos para acercarnos a públicos tan difíciles como los adolescentes. (puede que con la idea de gamificación que se comentaba antes podamos atraerlos hacia la biblioteca).
Después de la pausa para comer las jornadas venían con dos sesiones muy interesantes, por un lado la presentación de las nuevas reglas de catalogación, las RDA, cuya implantación está planificado para este preciso año; y por otro lado, un taller de relaciones interpersonales y motivación de equipos, muy importante puesto que el saber gestionar un equipo es algo que debemos saber hacer. Está demostrado que si todo un grupo se complementa y se dirige al mismo objetivo éste se acabará cumpliendo, en más o menos tiempo, pero se logrará conseguir.
Después de estas dos magníficas charlas el participante podía escoger entre tres más dedicadas a temas variados e importantes en nuestro ámbito: una sesión sobre bibliotecas especializadas y patrimoniales, un taller de usabilidad, y una mesa redonda orientada a mostrar proyectos d’emprenedoria en el ámbito cultural (Yoleo, Mediazines, Esguard y Boolino).
Para finalizar el jueves, una mesa redonda sobre Tendencias en el consumo cultural moderada por Carme Fenoll y cuyos participantes eran: Bernat Puigtobella del portal digital Núvol; Carles A. Foguet de la revista Jot Down Magazine y, finalmente, Eduard Voltas de la revista Time Out Barcelona. Fue un debate interesante sobre tendencia en el ámbito de las publicaciones seriadas y sobre el emprendimiento cultural. Cada aportación nos ofrecía diferentes puntos de vista sobre temas como por qué hay un bajo nivel de consumo cultural, tendencias lectoras, experiencias, proyectos internacionales, etc. Como el resto de actividades, la sala se llenó hasta los topes.
El viernes vino cargado de nuevas actividades para escoger. De buena mañana los participantes pudieron optar por una sesión de comunicaciones y experiencias en bibliotecas infantiles, una mesa redonda sobre gobernanza de la información o bien una sesión en donde participaron varios bibliotecarios que en su día dejaron sus trabajos y optaron por emprender su propio negocio.
Después de la pausa hubo tres actividades más, también muy bien acogidas por el público: en primer lugar una sesión de experiencias en bibliotecas públicas. Esta actividad se hizo en la sala-auditorio y fue quizá la que más afluencia de público tuvo, ya que la mayoría de asistentes a las jornadas es personal que trabaja en biblioteca pública. En una sala paralela se podía escuchar sobre plataformas audiovisuales y la relación con los usuarios. Finalmente, había también una mesa redonda muy interesante sobre los límites del humor gráfico, en donde se expusieron casos reales basados en la experiencia de los que formaban la mesa, todos ellos expertos en el tema y referentes en el mundo de la historieta y el humor gráfico.
La conferencia de clausura, pronunciada por Vicent Partal de Vilaweb, estuvo precedida por dos leves intervenciones: una por parte de Glòria Pérez-Salmerón y otra de Adela d’Alòs-Moner, que habló de la Fundación Biblioteca Social. Daniel Gil, presidente del COBDC, puso el punto final a unas jornadas que, sin duda, han sido interesantes y dejan con ganas de más.
Conclusión
Tal y como hemos comentado durante el post, estas jornadas han servido para saber en qué punto están las bibliotecas, su situación y hacia dónde queremos ir como profesión. Las nuevas tendencias de la sociedad nos pueden inspirar mucho a la hora de establecer nuevos proyectos incluso servicios bibliotecarios o si más no, modificarlos e incluso mejorarlos de alguna manera a la realidad de la actual sociedad. Siempre se ha comentado que las bibliotecas tienen que ofrecer aquellos servicios en función de las necesidades de sus usuarios y lo tiene que hacer también fijándose en las tendencias; en este caso, tecnológicas.