Tuning transmedia para la biblioteca

La humanidad lleva haciéndolo desde hace siglos: yo te lo cuento a ti; tú se lo cuentas a ella cambiándolo un poco; ella cuenta sólo lo que más le gusta; el siguiente en la cadena incorpora personajes o sucesos nuevos; y así ¡hasta el infinito… y más allá! Pero ahora tiene un nombre acorde con los tiempos tecnológicos. Son las transmedia storytelling o narrativas transmedia.

Muchos medios, muchas historias

Se trata de la creciente tendencia de los productores culturales a desarrollar relatos multimedia coordinados (series de televisión, novelas, historietas, juegos de ordenador, blogs o webs participativas…) sin que a priori esté claro cuál será el producto que tirará de los demás o, incluso, si habrá uno de ellos que prime sobre el resto: todos los medios transmiten diferentes experiencias de la historia o mundo global. Además, estas narrativas transmedia cuentan con la importante participación de los propios destinatarios de estos productos culturales (léase consumidores). Se convierten en productores-consumidores (prosumidores) cuando graban con sus móviles escenas alternativas para un capítulo de su serie favorita, escriben relatos explicando la vida anterior de un personaje o dibujan mapas del territorio donde transcurre la ficción.

Ana Carrillo ya nos habló de todo esto por aquí hace unos meses pero leyendo el ameno artículo de José Antonio Millán a raíz de la publicación del libro Narrativas transmedia: cuando todos los medios cuentan, de Carlos A. Scolari, he visto aún más clara la incidencia que estos contenidos multimedia pueden tener en nuestras bibliotecas.

Si la industria del entretenimiento va a crear narraciones coordinadas utilizando diferentes medios (libros, películas, series de TV, juegos, cómics…), las bibliotecas, como fuerza viva de educación, cultura e información (UNESCO dixit), debemos estar preparadas para facilitar a los ciudadanos el acceso a estos discursos de una manera cómoda y sencilla.

El cambio más obvio sería facilitar un acceso unificado a los diferentes medios de un mismo mundo narrativo. Esto ya se hace en muchas bibliotecas con los documentos de conocimiento o de ensayo (colocando juntos, en la misma estantería, los DVDs y libros divulgativos sobre Astronomía, por ejemplo). Pero es menos habitual cuando se trata de ficción. ¿Qué pasaría si colocáramos juntos los libros, series en DVD, cómics y juegos de ordenador sobre el mundo de Canción de Hielo y Fuego de George R. R. Martin? ¿Cómo lo véis?

¿Y cómo incorporamos esto a nuestro espacio físico de la bilbioteca?

Bueno, podríamos crear una sección de Narrativas Transmedia (o buscarle otro nombre más tentador como “Universos paralelos”, “Mundos abiertos”) para albergar todos los documentos de un mismo mundo narrativo: Star Wars, The Matrix, Perdidos, La Sirenita, Tintín…

Otras opciones para acercar las narrativas transmedia a nuestros lectores (y viceversa) podrían ser:

  • Crear pequeñas comunidades temáticas en nuestras páginas web para fomentar la participación de los fans de estos mundos narrativos.
  • Organizar un Club de Lectura anual alrededor de uno de estos mundos.
  • Una conferencia con la participación de los directores de un club de fans y varios de nuestros usuarios.
  • Un punto de interés de narrativas transmedia que cambiara de temática cada cierto tiempo.
  • Sesiones de Juegos de Rol.
  • Concursos de relato corto sobre finales o líneas argumentales alternativas o de ilustración sobre parajes, personajes o capítulos concretos; contando con los propios usuarios de la biblioteca como jurados del concurso.

No se trataría tanto de crear contenidos nuevos que seduzcan a los usuarios, sino de habilitar foros de encuentro y debate entre los fans (o posibles fans) y facilitar vías de acceso a los contenidos ya creados que estén disponibles en nuestras bibliotecas.

Es cuestión de incorporar un poco de tuning bibliotecario para hacer hueco a estas narrativas transmedia que ya están entre nosotros y parece que han venido para quedarse

David LHE

De marketing y de bibliotecas públicas: definición de servicios, estudios de usuarios, recursos de comunicación, definición de costes y precios, accesibilidad, diseño, creatividad... y todo aquello que ayude a acercar las bibliotecas a los ciudadanos.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *