Los congresos, según la definición de la RAE son: Junta de varias personas para deliberar sobre algún negocio o conferencia generalmente periódica en que los miembros de una asociación, cuerpo, organismo, profesión, etc., se reúnen para debatir cuestiones previamente fijadas.
Las definiciones que podemos llegar a dar cualquiera de nosotros dependiendo de la condición en la que nos presentemos a dichos congresos puede ser desde “aquellos eventos maravillosos en los que aprendemos mucho y hacemos mucho nertworking o lo que es lo mismo, conocer gente muy interesante de manera profesional, hasta el trabajo de planificación más duro que se presenta a la hora de empezar a organizar un evento de estas características”.
El pasado mes de junio asistí a dos congresos muy diferentes y a los dos asistí en condiciones también muy diferentes. El primero de ellos, fue el II Congreso de la Blogosfera Sanitaria: Internet y Salud que se celebró en Madrid el pasado 17 y 18 de Junio y en el que participé como asistente y el segundo, el celebrado en Ferrol el X Congreso del Capítulo Español de ISKO los días 30 de junio y 1 de julio, en el que tuve la oportunidad de participar activamente presentando una comunicación.
El II Congreso de la Blogosfera Sanitaria estuvo casi retransmitido vía twitter con el hashtag #2cbs. Mi participación como asistente fue llegar hasta el hospital, recoger la acreditación y la documentación e intentar organizar el tiempo para asistir a los talleres que más me interesaban y tuitear en cualquier momento. Preocupaciones después de realizar todo esto, cero.
Me gustaría señalar que este congreso fue gratuito, aunque se celebró en fin de semana, y pude comprobar la escasa por no decir mínima participación de profesionales de nuestro campo, aunque muchos nos seguían vía Twitter. Fue un congreso lleno de actividad y la mayoría de nosotros nos pasábamos cada 45 minutos correteando de un lado a otro para intentar buscar el aula o el espacio destinado a realizar la presentación que queríamos escuchar. Yo tuve la suerte de asistir a una serie de talleres muy interesantes tales como: Coste-efectividad de la participación social: cuando el tiempo es oro, Blog-Cabulario: ideas periodísticas para tu blog o un taller sobre software libre. Todo esto lo podéis encontrar desde la página de WikiSanidad donde se encuentran recogidas las presentaciones, los pósters y todo lo que se movió en esos mismos días. Conclusión: asistencia positiva y mucho networking.
La historia da la vuelta cuando los papeles de asistencia a un congreso cambian. Segundo congreso en el mismo mes, X Congreso del Capítulo Español de ISKO en Ferrol. Un resumen de lo que allí se expuso lo ha hecho Natalia Garea en su post sobre este congreso.
Meses antes de que se celebre, nos dedicamos a la preparación de una posible comunicación. Después de la aceptación hay que decidir quién va, en el caso de que se presenten varios autores, y qué es lo que se quiere transmitir allí. En esta fase, ya empiezan las preocupaciones.
Semanas antes de que se celebre, preparación intensiva de la presentación oral consultando recursos como el Arte de Presentar. Realizar la inscripción y la búsqueda de los diferentes medios para llegar hasta el lugar de celebración. Siguen las preocupaciones.
El día en cuestión, te alegra comprobar que al llegar al recinto los voluntarios te van a explicar dónde se encuentra cada sala, te van a proporcionar la documentación necesaria y te van a explicar alguna que otra cosa. La preocupación baja y aumentan los nervios por la tensión de la presentación. Conclusión: experiencia muy positiva y enriquecimiento profesional, también hay networking y reencuentros varios.
Con todo este diario de congresos, lo que os quiero decir es que no es todo lo que parece. Yo no había tenido la oportunidad de ver estas dos caras y nunca he estado como voluntaria ni organizadora, pero ahora sé que es un trabajo duro que requiere de esfuerzo, comprensión y paciencia porque los que nos estrenamos como ponentes llegamos con los nervios a flor de piel y lo que necesitamos es que todo esté bien para confiar en nosotros mismos y en lo que vamos a contar.
Muchas veces no nos damos cuenta de los diferentes papeles en que estamos implicados dentro de la organización de un congreso, ya sea como asistente, ponente, voluntario u organizador. No sabemos reconocer el esfuerzo y es muy importante que para que un congreso salga bien, debe llevar una perfecta organización.
Desde aquí os invito a que reflexionéis y nos contéis vuestras experiencias tanto positivas como negativas. ¿Te ha dejado alguna vez una asistencia a un congreso indiferente?